CALENTADORES EN LÍNEA

Benefits of Skid SystemsLos calentadores en línea, a veces denominados calentadores de circulación se utilizan a menudo para calentar fluidos y líquidos peligrosos. En concreto, se utilizan cuando el fluido que se calienta forma parte de un proceso más amplio y en curso (no se almacena).

El funcionamiento de un calentador en línea no es tan complejo como puede parecer a primera vista. En pocas palabras, los calentadores en línea hacen que la energía eléctrica se transfiera, en forma de calor, al fluido de destino.

Características de los calentadores en línea

Los calentadores en línea tienen varias características clave, entre ellas:

  • Son eficientes en su transferencia de calor, desperdiciando muy poco o nada de calor
  • Son fáciles de instalar y su mantenimiento es muy sencillo
  • Las proezas técnicas de los calefactores en línea hacen que sean capaces de integrarse en los estándares tecnológicos de las tuberías industriales más modernas de la actualidad.

Aplicaciones

Hay muchos tipos de aplicaciones para los calentadores en línea. Los principales usos son el procesamiento de sustancias como el vapor, el agua y el aceite residual y el control de sus temperaturas. Los calentadores ayudan a regular los fluidos y a mantener su viscosidad.

Mantener la viscosidad del fluido es un aspecto importante, sobre todo porque un líquido con una viscosidad inferior a la ideal ralentizará gradualmente el tiempo total de procesamiento. Para que no se produzca ese retraso, se aplican los calentadores en línea para calentar el líquido y mantener la viscosidad a una temperatura adecuada. Las industrias más comunes que utilizan calentadores en línea son la del petróleo y el gas y la de generación de energía. Esto se debe a que el costo de un retraso en sus procesos puede ser enorme.

La estructura

Un calentador en línea tiene una estructura ligeramente diferente a la de un calentador normal debido a la incorporación de varios tipos de tecnologías. Consta de una cámara metálica con un revestimiento anticorrosivo que cubre el calentador de inmersión. La razón de esta carcasa es evitar la mayor pérdida de calor posible para aumentar la eficiencia. En un entorno competitivo, la pérdida de calor no solo perjudica al proceso en general, sino que también provoca gastos operativos innecesarios.