PREVENCIÓN DE RIESGOS DE INCENDIO EN INSTALACIONES DE ALMACENAMIENTO DE GA
Las mejoras en las precauciones de seguridad, la tecnología y el diseño han tenido un impacto importante en la reducción de incendios en las instalaciones de almacenamiento. En 1980, hubo más de 1100 incendios de tanques de almacenamiento externos en los EE. UU., que produjeron daños a la propiedad estimados en $7 millones. Según la NFPA, los incidentes se habían reducido en un 76 % en 2011, lo que produjo 301 incendios y $4 millones en daños a la propiedad.
Aunque los avances en los materiales de los tanques de almacenamiento y la tecnología de calefacción industrial han reducido de manera eficaz los riesgos de incendio, no han podido eliminarlos por completo. Algunos de los factores de riesgo están fuera del control directo de los seres humanos. Por ejemplo, los rayos son el principal contribuyente a los incendios de los lugares de almacenamiento al aire libre.
Para reducir los riesgos de incendios en las instalaciones de almacenamiento de gas, es necesaria una selección cuidadosa de equipos y materiales.
Tipo de tanque y clasificación NEMA
El tipo de tanque debe adaptarse cuidadosamente a las actividades, condiciones y compuestos del medio almacenado. Uno de los recipientes más reconocibles en las instalaciones de almacenamiento de gas es el tanque de almacenamiento de gas natural licuado (GNL).
Un tanque de almacenamiento de GNL se mantiene sobre el suelo para su almacenamiento o se sujeta a los transportadores de GNL para su transporte. Utilizan recipientes dobles aislados que les permiten controlar mejor las temperaturas de almacenamiento y mantener su estado líquido.
Si el daño, la exposición al calor u otros factores causan ebullición y/o liberación de gases/vapores, se instalan dispositivos de liberación de presión para liberar los vapores. Esta liberación evita rupturas violentas, incendios y/o explosiones.
Además del tipo de tanque, se debe tener especial cuidado al seleccionar las clasificaciones NEMA del equipo. La Asociación Nacional de Fabricantes de Electricidad (NEMA, por sus siglas en inglés) establece normas que detallan el diseño, producción y distribución de productos. Estas determinan aspectos específicos tales como clasificaciones uniformes, pruebas, rendimiento y construcción para permitir a los fabricantes y compradores seleccionar la clasificación NEMA correcta para aplicaciones específicas.
En la industria del gas, las clasificaciones comunes utilizadas incluyen NEMA 4 (resistente a la humedad) y NEMA 7 (a prueba de explosiones). Los paneles de control digital con clasificación NEMA proporcionan calefacción de seguridad y precisión para todas las aplicaciones de calefacción.
Mantenimiento e inspección
El mantenimiento y la inspección regulares son esenciales para reducir los riesgos de incendio. El mantenimiento del calentador de inmersión mantiene los sistemas funcionando de manera eficiente y ayuda a prevenir el sobrecalentamiento y a detectar los primeros síntomas de daños o acumulación de sedimentos.
Además, los dispositivos de seguridad, tales como los dispositivos de liberación de presión y los monitores de temperatura, deben probarse periódicamente para garantizar un funcionamiento adecuado. Inspeccione los sellos y conexiones para detectar fugas, grietas y problemas de ajuste. Además, realice una inspección visual del tanque para detectar corrosión, descamación y deformidades que puedan indicar daños por temperatura o químicos.
Calentadores eléctricos
Para la industria del petróleo y el gas, los calentadores eléctricos son ideales. Los calentadores eléctricos con bridas, tapón roscado y laterales brindan un mejor rendimiento y seguridad. Estos factores son esenciales cuando se trata de la producción y el almacenamiento de productos inflamables y combustibles.
La energía eléctrica responde mejor, lo que permite ajustes rápidos y un calentamiento más preciso. Además, así se evitan los riesgos del calentamiento por combustión, lo que los hace más seguros para usarlos para el calentamiento directo de medios inflamables y combustibles.
Su confiabilidad y compatibilidad con la ayuda de termopozos, interruptores de apagado de seguridad y otros accesorios contribuyen a garantizar un calentamiento seguro y eficaz.
Automatización
La automatización no sirve solo para mejorar la eficiencia operativa y reducir los costos de personal. También puede aumentar las capacidades de monitoreo y de respuesta, lo que resulta en una mayor reducción del riesgo. La tecnología de automatización ha tenido un impacto directo en la reducción del número de incidentes de incendios en las instalaciones de almacenamiento de gas.
Los paneles de control digital automatizados no requieren un operador humano. Como tal, pueden monitorear constantemente, ajustándose a los cambios y discrepancias en tiempo real. Junto con sensores inteligentes, esto les permite encender los calentadores y aumentar las temperaturas según sea necesario, o activar dispositivos de apagado si las temperaturas o los niveles de líquido llegan a valores fuera del rango seguro.
Planificación de respuesta y supresión
Incluso si se han tomado todas las medidas preventivas correctas, es importante tener un plan en caso de producirse un incendio.
Planificación/inspección previa al incidente
Al inaugurar un sitio, después de realizar cambios importantes, o en intervalos regulados por su estado/distrito, realice una inspección previa al incidente. Durante la inspección, las autoridades ingresan e inspeccionan la instalación, para identificar los riesgos que se pueden solucionar. Además, se utilizan notas, información y planos de planta recopilados para crear un plan previo al incidente que se puede aplicar en una mitigación de incidentes más eficiente, si se requieren servicios de emergencia.
La encuesta también indica elementos de construcción, suministros de agua disponibles y posibles riesgos de obstrucción que podrían interferir en los esfuerzos de respuesta en caso de una emergencia. La identificación de estos peligros por adelantado reduce los riesgos y ayuda a proteger la propiedad y al personal.
Dispositivo de seguridad
Otro factor importante a considerar son los dispositivos de seguridad instalados. Las alarmas en funcionamiento pueden alertar al personal y a los servicios de emergencia rápidamente en caso de una emergencia. Además, incorporar sistemas de supresión, tales como rociadores, puede ayudar a reducir el daño hasta que llegue el personal de emergencia.
En conjunto, la planificación de la respuesta y la supresión puede ayudar a reducir los daños, las pérdidas y el riesgo humano en caso de que ocurra un incendio.