QUEMADORES DE CIRCULACIÓN NATURAL FRENTE A LOS DE CIRCULACIÓN FORZADA

Los quemadores son equipos de gran impacto en múltiples industrias. Se utilizan en la producción, el transporte y el refinamiento de todo tipo de productos que empleamos en nuestra vida cotidiana.

Son especialmente valiosos en la industria del petróleo y el gas, donde intervienen en los procesos previos, intermedios y posteriores. Una de sus funciones clave es la creación de productos como la gasolina y otros fuelóleos mediante la producción de hidrocarburos. Los quemadores también desempeñan múltiples funciones en el procesamiento y refinamiento de hidrocarburos.

En las refinerías de petróleo y gas estos calentadores intervienen en la separación, deshidratación y compresión.

Para llevar a cabo esta gran cantidad de tareas importantes, existen dos tipos básicos de quemadores: de circulación forzada y de circulación natural.

Diferencias entre los quemadores de circulación natural y forzada

Presión

El funcionamiento de los quemadores de circulación forzada utiliza la energía para crear sus propias condiciones ambientales. Esto les permite crear más presión y tener un mayor control sobre ella. Este tipo de quemador mantiene el aire/los gases de combustión por encima de la presión atmosférica. Dicha presión facilita el flujo de los gases a través del quemador.

Los quemadores de circulación natural, por el contrario, no crean su propia presión. Por lo tanto, sus gases de combustión utilizan la densidad de los gases ambientales para crear flujo.

Costo

Un quemador de circulación natural es un equipo mucho menos complejo. Tienen un diseño sencillo y menos piezas móviles. Esto los convierte en una solución más rentable. Además, el hecho de no tener que crear presión supone un ahorro de costos energéticos.

Eficiencia

Aunque el natural es más barato, los quemadores de circulación forzada son mucho más eficientes. Las operaciones de procesamiento de petróleo y gas a menudo encuentran que su eficiencia es mayor que su rentabilidad.

Su mayor grado de control favorece este beneficio. No están sujetos a las condiciones atmosféricas y ambientales. Así se reducen los retrasos o los tiempos de inactividad no programados.

Simplicidad

El diseño más sencillo de los quemadores de circulación natural va más allá de hacerlos más rentables. También reduce los requisitos de mantenimiento, disminuye el riesgo de averías y da lugar a menos reparaciones. De este modo, los quemadores naturales también pueden ser eficaces para evitar tiempos de inactividad no programados.

Acceso a la energía

El costo, el acceso y la disponibilidad de energía también determinan el mejor tipo de quemador. En lugares remotos, por ejemplo, las fuentes de energía suelen ser más limitadas, más caras o menos fiables. En estos casos, los quemadores naturales pueden ser una mejor solución.

Compatibilidad con calentadores eléctricos

Otra consideración importante a la hora de seleccionar un quemador es su compatibilidad. Como las industrias están adoptando rápidamente las ventajas de los calentadores eléctricos, se está convirtiendo en algo esencial asegurarse de que los equipos funcionan con ellos.

En este caso, tanto los quemadores de circulación forzada como los de circulación natural son compatibles con los calentadores eléctricos. La electricidad es una fuente de energía versátil. No solo funciona bien con una variedad de equipos, sino que también es compatible con fuentes de energía emergentes como la eólica, la solar y la batería.

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